PATENTES O PROTECCIÓN DE SECRETO INDUSTRIAL / EMPRESARIAL
Las patentes son la forma más conocida de proteger un invento: impiden que la competencia imite los productos / procedimientos inventados por una empresa.
Los secretos industriales / empresariales son menos conocidos: no se registran, no son públicos … y se les da menos importancia. Pero ambas protecciones son útiles, dependiendo de las circunstancias de la empresa.
Patente
La Patente protege una invención. Es un monopolio, otorgado por el Estado al inventor, o a la empresa que lo ha adquirido. Impide que los terceros fabriquen, usen o vendan el invento, por un período determinado.
A cambio, debe ser inscrita en un registro público: en España, la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM). Por tanto, todo el mundo puede tener acceso a ese invento.
Secreto Industrial / Empresarial
El gran desconocido, el secreto industrial / empresarial puede ser una invención, una mejora, un método, un protocolo empresarial … No necesita ser registrado; aunque (a veces) puede ser inscrito: en el Registro de la Propiedad Intelectual, o mediante un depósito notarial.
Para ser protegido como secreto, no puede ser puesto a disposición del público. Ha de mantenerse en secreto, y sólo tener acceso aquellas personas, que la empresa decide. La gran diferencia es que el “Know How” no da un monopolio legal: puede ser imitado. Por eso, es tan importante su protección.
Si la empresa propietaria de ese secreto industrial toma medidas para mantenerlo Secreto, nadie puede usar esa información, sin permiso. Por ejemplo: no se puede usar, ni entregar a terceros, la información protegida, o entregada a alguien, al amparo de un contrato de confidencialidad.
¿Secretos industriales / empresariales convertidos en patentes?
Muchas patentes empiezan siendo secretos industriales / empresariales. Antes de registrar la patente, la invención ya tiene valor económico, precisamente porque no es conocida. Por esto, muchas empresas tienen una política activa de protección de sus secretos industriales.
Posteriormente, a veces, la empresa convierte ese secreto en una patente. Ciertos factores influyen en esa decisión.
¿POR QUÉ CONVIENE PATENTAR?
Hay inventos de fácil desarrollo técnico, por caminos distintos o mediante ingeniería inversa.
Los secretos industriales no impiden a un tercero que desarrolle el mismo producto, mediante un procedimiento independiente o mediante ingeniería inversa.
En cambio, una patente sí lo impide. Es más, un competidor puede desarrollar un invento similar, o a través de ingeniería inversa, y después patentarlo. Entonces, podría impedirte usar tu secreto industrial: porque no está patentado.
Mayor protección
En ciertos casos los secretos industriales funcionan, en los casos en que la información:
(i) Está protegida por medidas de seguridad y control; y
(ii) Sólo se distribuye a pocas personas;
(iii) Que previamente, han firmado un Contrato de Confidencialidad.
En cambio, si la empresa ha de compartir las invenciones / los secretos con proveedores, empleados, clientes … el riesgo de distribución de la información es más alto.
En estos casos, es más conveniente registrar una Patente.
¿CUÁNDO ES MEJOR UN SECRETO INDUSTRIAL / EMPRESARIAL?
¿Que información no se puede patentar?
No todos los secretos / inventos son patentables en España. Sólo son registrables los inventos: (i) novedosos (no están en el estado de la técnica), (ii) que suponen actividad inventiva y (iii) tienen aplicación industrial.
Si el “Know How” industrial / empresarial no cumple esos requisitos, no se puede patentar en España. Así que habremos de protegerlo como secreto industrial / comercial.
El registro de una patente no es rápido
Registrar una patente en España lleva su tiempo: estudiar el estado de la técnica, presentarla con toda la documentación necesaria, posibles discusiones con la Oficina de Patentes y Marcas, posibles oposiciones de terceros …
Si el invento / secreto a proteger tiene una vida breve, estará “muerto”, para cuando haya sido patentado. Si la información / el invento tienen valor sólo durante uno o dos años, no vale la pena registrarlo en España como patente. Porque la empresa tardará ese tiempo en obtener la patente española. En estos casos, la protección como secreto industrial / empresarial puede ser más útil.
Vida más larga. Protección, durante más años
La protección que dan las patentes dura 20 años. Acabado este período, cualquiera puede usar la invención. En cambio, un secreto industrial / empresarial puede durar mucho más.
Teniendo en cuenta que muchas invenciones / secretos pueden necesitar más de 20 años, para desarrollar toda su capacidad comercial, la protección que de la patente puede ser demasiado breve.
Las patentes son caras
Las patentes en España son caras. Es aún más caro obtener una patente europea; o extender los efectos a otros países importantes, como EEUU o Japón. Además, hay costes de mantenimiento.
En cambio, proteger información empresarial, como secreto industrial / empresarial es normalmente más barato; aunque tiene gastos, como su protección, las medidas de seguridad o los costes de los contratos de confidencialidad.
Dificultades, para probar el uso ilícito
Si se prevé que va a ser difícil descubrir (y probar) el uso ilícito de la información (porque se trata de métodos / protocolos internos), es más seguro proteger la invención como secreto industrial / empresarial, antes que como patente. Depende, pues, de las circunstancias, que una u otra sea mejor.
¿COMO PONER EN MARCHA LA PROTECCIÓN DE LA INFORMACIÓN / DE LAS INVENCIONES EN LA EMPRESA?
Auditoría del Capital Intelectual
Las empresas creativas, inventivas deben auditar su capital intelectual. Incluye entrevistas con su personal clave: dirección, I+D, marketing, financieros, asesores jurídicos. Así se reúne información esencial, sobre las creaciones y los métodos importantes de la empresa.
Metodología
La auditoría debería describir: la información confidencial y los inventos, las formas de protección ya puestas en marcha, las personas que tienen acceso a ella, el valor de la información confidencial y el coste de su creación y protección, los cortafuegos establecidos, para evitar que sea copiada, o extraída de la empresa …
Plan de Protección
Acabada la auditoría de propiedad industrial e intelectual, conviene desarrollar un plan para su protección. Se puede decidir qué inventos proteger como patente y qué proyectos / protocolos / planes son protegibles como secretos industriales / empresariales.
Después, se debe preparar y ejecutar un Protocolo de Protección: cómo se protege, quién tiene acceso, que documentos deben firmar …
Especial protección, para la internacionalización de la empresa
Por supuesto, estos factores no son únicos. Por ejemplo, se debe estudiar qué protección tienen los secretos empresariales fuera de España: contratos de no competencia, acuerdos de confidencialidad … Necesitamos comprobar que la protección es la adecuada.
Así podemos asegurar que las invenciones y secretos de una empresa estarán protegidos.
En cualquier caso, una cosa está muy clara. Sea cuál sea tu elección, la protección del capital intelectual es indispensable.
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Gemma Viudas Consultor |